El nuevo Ford Explorer 2025 representa un paso importante para la marca del óvalo azul. Se trata de un SUV totalmente eléctrico diseñado para el mercado europeo y desarrollado sobre la plataforma MEB en colaboración con Volkswagen. Sin embargo, Ford ha puesto mucho de su sello personal, tanto en el diseño como en la conducción, para ofrecer una experiencia que refleje su ADN. El Explorer marca el comienzo de una nueva era para la marca, dirigida a quienes buscan espacio, comodidad y una conducción eléctrica eficiente y bien afinada.
Diseño limpio con personalidad fuerte por dentro y por fuera
El estilo de la Ford Explorer 2025 apuesta por un diseño minimalista pero robusto, con superficies limpias y pocos adornos para resaltar la forma. En el frontal, destaca la firma luminosa unida a la banda negra con el nombre Explorer integrado, un detalle que se repite en la parte trasera con un efecto tridimensional que le aporta coherencia visual. Las llantas de 20 o 21 pulgadas son uno de los elementos más distintivos, con un acabado bitono que aporta carácter al conjunto.
Ford la presenta como la heredera espiritual del Focus, aunque con una aproximación crossover más alta y espaciosa. Sus dimensiones la sitúan en el segmento C, pero el espacio interior es digno de un segmento D, ideal para quienes necesitan versatilidad y amplitud en un coche eléctrico.
Interior pensado para la vida diaria con soluciones inteligentes
El habitáculo de la Ford Explorer 2025 está diseñado pensando en el uso diario. Destaca el túnel central con una pantalla vertical ajustable para el sistema multimedia, que permite una interacción más intuitiva. Incluye dos compartimentos para móviles, uno de ellos con carga inalámbrica, y un amplio apoyabrazos central con espacio suficiente para guardar incluso un portátil de 13 pulgadas.
El maletero arranca con 530 litros de capacidad y puede superar los 1.000 litros reales al abatir los asientos traseros. La habitabilidad también es notable para personas de gran estatura, superando los 1,90 metros sin problemas. El único aspecto mejorable es la presencia de plásticos duros en algunas zonas, algo cuestionable en una versión que ronda los 55.000 euros.
Confort y precisión en la conducción sin perder dinamismo
Ford ha trabajado intensamente para personalizar la plataforma MEB y dar a la Explorer una conducción más cercana a su estilo tradicional. La dirección ha sido recalibrada y ofrece una respuesta más precisa. Las suspensiones tipo McPherson delante y multilink detrás aportan un buen equilibrio entre suavidad y control.
Aunque es más alta que la Ford Capri, el Explorer mantiene la compostura en curvas, sin inclinaciones excesivas y con una buena estabilidad general. Esta versión con tracción total incluye dos motores eléctricos, aunque el trasero sigue siendo el principal. Esto permite cierta agilidad en curvas, con una respuesta que puede ser incluso divertida en determinadas situaciones.
Consumos ajustados y recarga rápida para disfrutar sin estrés
La batería útil de 79 kWh ofrece una autonomía homologada de hasta 560 km en ciclo WLTP. En uso real, se pueden alcanzar fácilmente 500 km en recorridos mixtos, con consumos de unos 14 kWh/100 km. En ciudad, incluso baja a 12, y en autopista oscila entre 400 y 450 km según el ritmo.
Un punto fuerte es la carga rápida: admite hasta 185 kW en corriente continua, lo que permite pasar del 20 al 80 % en menos de 25 minutos. Esto la convierte en una opción ideal para viajes largos sin tiempos muertos.
Posicionamiento de gama media alta con ambiciones premium
El precio de partida de la Ford Explorer 2025 es de 41.500 euros en la versión básica con un solo motor. La versión Premium, con tracción total, 340 CV y elementos adicionales como el techo panorámico, alcanza los 55.000 euros. Una cifra considerable, pero acorde con su equipamiento, el sistema de infoentretenimiento SYNC de Ford y el sonido firmado por Bang & Olufsen, ideal para quienes buscan calidad incluso al volante.
Resta por ver si esta estrategia de Ford, que busca salir del rol de marca generalista y entrar en el segmento premium eléctrico con estilo europeo, tendrá éxito. Pero lo que está claro es que el Explorer 2025 tiene argumentos sólidos para seducir al nuevo conductor eléctrico europeo.