En 2025, el concepto de coche asequible ya no se mide solo por el precio de venta. Los conductores buscan un equilibrio más profundo entre calidad de construcción, tecnología, fiabilidad y costes de mantenimiento. En un mercado en constante transformación, con la electrificación en auge y precios cada vez más altos, Dacia sigue siendo un referente para quienes valoran la lógica y la practicidad. El nuevo Bigster 2025 es la mejor prueba de ello: un SUV de tamaño medio que eleva la filosofía de la marca a un nuevo nivel, ofreciendo espacio, eficiencia y equipamiento moderno a un precio todavía accesible.
Un proyecto clave para Dacia
El Bigster marca un paso importante para la marca rumana, plenamente integrada hoy en el grupo Renault. Con este modelo, Dacia entra en el segmento de los SUV medianos y completa una gama que en los últimos años ha cosechado grandes éxitos con modelos como Sandero, Jogger y Duster. El nuevo SUV, con 4,60 metros de longitud, se construye sobre la plataforma modular CMF-B, la misma que emplean el Renault Captur y el Nissan Juke, aunque adaptada para ofrecer motores más potentes y un habitáculo más amplio.
El objetivo es ambicioso, pero fiel al ADN de Dacia: ofrecer un coche familiar espacioso, robusto y tecnológicamente actualizado, sin perder de vista el principio que ha hecho fuerte a la marca: el máximo valor posible al precio más competitivo del mercado.
Diseño: robustez y funcionalidad
El Bigster interpreta con personalidad el nuevo lenguaje de diseño de Dacia. Las líneas tensas, la carrocería musculosa y la firma luminosa en forma de “Y” le dan un carácter decidido pero equilibrado. Su presencia transmite solidez y confianza, con pasos de rueda marcados y protecciones laterales que subrayan su aspecto práctico y aventurero. No busca llamar la atención, sino destacar por coherencia y sencillez, en la mejor tradición de Dacia.
El interior refleja esa misma filosofía. El habitáculo es amplio, luminoso y funcional, con asientos cómodos y una posición de conducción elevada que mejora la visibilidad. Los materiales, sencillos pero resistentes, están bien ensamblados y pensados para durar. Con más de 500 litros de maletero, la Bigster confirma su enfoque práctico y se posiciona como una opción ideal para familias y conductores que buscan versatilidad sin renunciar al confort.
Motores: eficiencia y coherencia
La gama de motores del Dacia Bigster refleja la estrategia de eficiencia de la marca. El bloque 1.2 TCe mild hybrid de 130 CV, con sistema de 48 voltios y tracción delantera o total, ofrece un equilibrio ideal entre prestaciones y consumo. El motor 1.6 Hybrid de 140 CV, ya probado en el Jogger y el Duster, emplea un sistema híbrido completo con cambio automático multimodo que prioriza la suavidad y la eficiencia, con un consumo real en torno a los cinco litros cada cien kilómetros.
También está disponible la versión bifuel 1.0 ECO-G de 100 CV, capaz de funcionar con gasolina o GLP, una opción especialmente interesante para quienes recorren muchos kilómetros y desean reducir los gastos de uso. La posibilidad de elegir entre tracción delantera o 4×4 amplía el atractivo del modelo, manteniendo viva la tradición de Dacia de ofrecer SUV capaces fuera del asfalto, algo cada vez menos común en este segmento.
Tecnología y seguridad: todo lo necesario
La Bigster se ajusta a los estándares tecnológicos actuales sin renunciar a la sencillez de uso. Su sistema multimedia con pantalla central de 10 pulgadas ofrece conectividad inalámbrica para Android Auto y Apple CarPlay, mientras que el cuadro de instrumentos digital es claro y fácil de leer.
En materia de seguridad, la dotación es completa: incluye frenada automática de emergencia, mantenimiento de carril, reconocimiento de señales de tráfico, alerta de ángulo muerto y control de crucero adaptativo. La filosofía sigue siendo la misma: tecnología útil, intuitiva y fiable, sin complicaciones innecesarias.
Confort y comportamiento
La nueva plataforma aporta una estructura sólida y equilibrada, que se traduce en un confort de marcha notable y una buena precisión de conducción. Las suspensiones filtran bien las irregularidades, y la dirección, ligera pero precisa, contribuye a una conducción relajada y predecible.
En autopista, el coche se muestra estable y silencioso gracias a un aislamiento acústico mejorado respecto a los modelos anteriores. Pese a su tamaño, resulta ágil en ciudad, lo que refuerza su carácter familiar y polivalente. Las versiones con tracción total ofrecen un comportamiento seguro incluso sobre firmes deslizantes, confirmando la versatilidad propia de los SUV Dacia.
¿Cuánto cuesta el Dacia Bigster?
El precio es, sin duda, uno de los grandes argumentos del Bigster. El catálogo arranca en 24.900 euros para la versión 1.0 ECO-G, sube a 26.000 euros para la mild hybrid y alcanza los 30.000 euros para la versión full hybrid de 140 CV. Estas cifras la sitúan claramente por debajo de la media del segmento, pese a ofrecer espacio, equipamiento y confort comparables a modelos de categoría superior.
Los costes de uso también son reducidos: bajo consumo, mantenimiento sencillo y la conocida fiabilidad mecánica del grupo Renault aseguran un coste total de propiedad muy competitivo. En definitiva, la Bigster es un SUV que ofrece mucho más de lo que cuesta, consolidando la reputación de Dacia como marca que convierte el valor en una realidad tangible.
Conclusiones
Con la Bigster, Dacia entra en una nueva etapa de madurez. La marca, sin renunciar a su espíritu práctico y racional, demuestra que puede crecer en calidad, ambición y contenido técnico. El Bigster 2025 es la síntesis perfecta entre accesibilidad y tecnología moderna: un SUV familiar, espacioso y convincente para un público amplio.
En un mercado en el que los precios de los SUV siguen subiendo, el Dacia Bigster se impone como una elección lógica, sensata y plenamente actual.